En nuestro camino de apoyar el desarrollo de la nueva industria de la tecnología financiera en Colombia, y después de estos primeros meses de planeación para todos, ya están claras algunas tendencias en el 2020 para que los jugadores en el ecosistema Fintech estén atentos. Estas son las siete grandes predicciones y tendencias:
El 2020 será el año del inicio de la democratización de las inversiones a través de canales digitales. En una nota anterior comentaba cómo se está activando este segmento donde comisionistas de bolsa, fiduciarias y SAIs están incursionando en la creación de sus Wealthtechs corporativas, para la distribución, custodia y administración de assets classes con mejores condiciones de acceso, especialmente, por parte de entidades no bancarizadas y extranjeras.
Para este año, veremos un abanico amplio de Fintechs con nuevos productos de inversión en renta variable, ahorro a través pensiones voluntarias y modelos para segmentos de afinidad como niños y B2B. Todo este movimiento seguramente se dinamizará aún más con los nuevos cambios normativos de estándares para Asset Managers, mercado balcón y fondos de capital privado que se están preparando.
Nuevas plataformas de Crowdfunding inmobiliario, actualizaciones al régimen de titularización, seguros digitales para B2B, incendio o terremoto, esquemas simplificados y ágiles en los procesos de comercialización con onboarding digital son las principales innovaciones que están llegando en uno de los sectores que requiere acelerar su transformación digital, sobre todo, en la cadena de valor de la financiación de la actividad inmobiliaria.
Ante la expectativa de la constitución de los primeros neobancos vigilados por la SuperFinanciera y otros grandes jugadores regionales con pretensiones serias de ingresar a Colombia, se puede considerar que su efecto catalizador y desafiante de cultura financiera y encanto por el consumidor no lo veremos este año aún. En parte por la definición del modelo de multibanca con el que quieren ingresar al mercado, negociaciones con las marcas, prioridades en otros países y la entrada en vigencia del modelo de licencias condicionadas que ha planteado el Gobierno Nacional.
Es increíble la multiplicación de nuevos operadores de crédito digital que está teniendo el país. Eso es notable dado el mercado y la necesidad que da espacio para todos. Sin embargo, preocupan las fallas de información sobre su estructura de costos para el consumidor y los posibles arbitrajes que pueda generar esta oferta entre jugadores bancarios, no bancarios, consolidados y emergentes, extranjeros y locales. Esperemos que este boom ayude a promover la reintegración financiera de las personas y comercios, y por el contrario, un cambio de reglas de juego desde el punto de vista jurídico, no termine ‘sacudiendo’ al sector y el gota a gota siga tomando más terreno.
Las mipymes son la base empresarial del país (corresponden al 94% de las empresas, generan el 81% de los empleos formales y contribuyen el 40% del PIB), sin embargo, son las más desatendidas. Solamente, el 43% logran sobrevivir después de 5 años de iniciar, principalmente, por no acceder al financiamiento cuándo lo requieren. Teniendo en cuenta esta problemática, está identificada la gran oportunidad para las Fintechs para abordar este segmento con una oferta integral.
Este año debido a la masificación de la facturación electrónica y programas gubernamentales de apoyo y fomento empresarial, se ampliará positivamente el espectro y demanda de soluciones de crédito digital (capital de trabajo y tarjeta de crédito corporativa), financiamiento colaborativo y e-factoring para este segmento, y por otro lado, nuevas modalidades de crédito para transferencia, independientes y Gig Economy. Incluso, la llegada del primer prospecto de neobanco para las mipymes.
A pesar que en el mercado hay Fintechs con esquemas exitosos de venta digital de seguros y y las grandes aseguradoras del país están innovando e invirtiendo en Insurtechs desde sus aceleradoras y fondos internos, todavía la oferta es reducida desde el middle y back-office de esta actividad. Sin embargo, esto cambiará con la modernización de los registros públicos del Estado (historia clínica electrónica y servicios ciudadanos digitales), SARLAFT 4.0 y la revisión integral que se hará al marco normativo del sector asegurador.
En línea con las tendencias internacionales, creo que lo más destacable para este año es la introducción de la banca abierta o movilidad e interoperabilidad de datos financieros en Colombia. Se están coordinando múltiples iniciativas donde bancos y grupos empresariales están diseñando consorcios y startups corporativas para identidad digital y agregación de cuentas, los gremios están consensuando pilotos, y por último, los supervisores y reguladores están preparando estudios normativos, proyectos de decreto de portabilidad de cuentas y expedición de nuevos estándares de iniciación de pagos.
Será un 2020 imparable.
edwin@mibank.co
En nuestro camino de apoyar el desarrollo de la nueva industria de la tecnología financiera en Colombia, y después de estos primeros meses de planeación para todos, ya están claras algunas tendencias en el 2020 para que los jugadores en el ecosistema Fintech estén atentos. Estas son las siete grandes predicciones y tendencias:
El 2020 será el año del inicio de la democratización de las inversiones a través de canales digitales. En una nota anterior comentaba cómo se está activando este segmento donde comisionistas de bolsa, fiduciarias y SAIs están incursionando en la creación de sus Wealthtechs corporativas, para la distribución, custodia y administración de assets classes con mejores condiciones de acceso, especialmente, por parte de entidades no bancarizadas y extranjeras.
Para este año, veremos un abanico amplio de Fintechs con nuevos productos de inversión en renta variable, ahorro a través pensiones voluntarias y modelos para segmentos de afinidad como niños y B2B. Todo este movimiento seguramente se dinamizará aún más con los nuevos cambios normativos de estándares para Asset Managers, mercado balcón y fondos de capital privado que se están preparando.
Nuevas plataformas de Crowdfunding inmobiliario, actualizaciones al régimen de titularización, seguros digitales para B2B, incendio o terremoto, esquemas simplificados y ágiles en los procesos de comercialización con onboarding digital son las principales innovaciones que están llegando en uno de los sectores que requiere acelerar su transformación digital, sobre todo, en la cadena de valor de la financiación de la actividad inmobiliaria.
Ante la expectativa de la constitución de los primeros neobancos vigilados por la SuperFinanciera y otros grandes jugadores regionales con pretensiones serias de ingresar a Colombia, se puede considerar que su efecto catalizador y desafiante de cultura financiera y encanto por el consumidor no lo veremos este año aún. En parte por la definición del modelo de multibanca con el que quieren ingresar al mercado, negociaciones con las marcas, prioridades en otros países y la entrada en vigencia del modelo de licencias condicionadas que ha planteado el Gobierno Nacional.
Es increíble la multiplicación de nuevos operadores de crédito digital que está teniendo el país. Eso es notable dado el mercado y la necesidad que da espacio para todos. Sin embargo, preocupan las fallas de información sobre su estructura de costos para el consumidor y los posibles arbitrajes que pueda generar esta oferta entre jugadores bancarios, no bancarios, consolidados y emergentes, extranjeros y locales. Esperemos que este boom ayude a promover la reintegración financiera de las personas y comercios, y por el contrario, un cambio de reglas de juego desde el punto de vista jurídico, no termine ‘sacudiendo’ al sector y el gota a gota siga tomando más terreno.
Las mipymes son la base empresarial del país (corresponden al 94% de las empresas, generan el 81% de los empleos formales y contribuyen el 40% del PIB), sin embargo, son las más desatendidas. Solamente, el 43% logran sobrevivir después de 5 años de iniciar, principalmente, por no acceder al financiamiento cuándo lo requieren. Teniendo en cuenta esta problemática, está identificada la gran oportunidad para las Fintechs para abordar este segmento con una oferta integral.
Este año debido a la masificación de la facturación electrónica y programas gubernamentales de apoyo y fomento empresarial, se ampliará positivamente el espectro y demanda de soluciones de crédito digital (capital de trabajo y tarjeta de crédito corporativa), financiamiento colaborativo y e-factoring para este segmento, y por otro lado, nuevas modalidades de crédito para transferencia, independientes y Gig Economy. Incluso, la llegada del primer prospecto de neobanco para las mipymes.
A pesar que en el mercado hay Fintechs con esquemas exitosos de venta digital de seguros y y las grandes aseguradoras del país están innovando e invirtiendo en Insurtechs desde sus aceleradoras y fondos internos, todavía la oferta es reducida desde el middle y back-office de esta actividad. Sin embargo, esto cambiará con la modernización de los registros públicos del Estado (historia clínica electrónica y servicios ciudadanos digitales), SARLAFT 4.0 y la revisión integral que se hará al marco normativo del sector asegurador.
En línea con las tendencias internacionales, creo que lo más destacable para este año es la introducción de la banca abierta o movilidad e interoperabilidad de datos financieros en Colombia. Se están coordinando múltiples iniciativas donde bancos y grupos empresariales están diseñando consorcios y startups corporativas para identidad digital y agregación de cuentas, los gremios están consensuando pilotos, y por último, los supervisores y reguladores están preparando estudios normativos, proyectos de decreto de portabilidad de cuentas y expedición de nuevos estándares de iniciación de pagos.
Será un 2020 imparable.
edwin@mibank.co