En un mundo cada vez más interconectado, los pagos transfronterizos están jugando un papel crucial en la economía global. Estos pagos, que permiten transferencias de dinero entre países, están experimentando una transformación significativa debido a la digitalización y la evolución de las Fintech. A continuación, presentamos algunas de las conclusiones más importantes sobre este sector, basadas en el último informe de Minsait Payments.
Los pagos transfronterizos están en una trayectoria de crecimiento acelerado. Se estima que el valor total de estos pagos alcanzará los 250 billones de dólares para 2027. Este aumento refleja la creciente demanda de transacciones internacionales en un mundo globalizado. Sin embargo, a pesar de su expansión, estos pagos siguen enfrentando desafíos significativos, siendo más costosos, lentos y menos transparentes en comparación con las transacciones domésticas.
Latinoamérica es una de las regiones más afectadas por el flujo de remesas, representando el 17% del total mundial. En 2024, se espera que la región gestione un volumen de remesas de 846,000 millones de dólares. Estas remesas son vitales para millones de personas, proporcionando una fuente esencial de ingresos que muchas familias utilizan para cubrir necesidades básicas como alimentación, educación y salud.
Las remesas no solo son un motor económico, sino también un soporte social crítico. En países como Ecuador, Perú, Colombia y República Dominicana, más del 40% de la población depende de las remesas para su subsistencia. En República Dominicana, esta cifra alcanza un asombroso 67%. Este flujo constante de dinero del exterior es esencial para la estabilidad económica y social de muchas comunidades en la región.
A pesar del crecimiento y la importancia de las remesas, el sector enfrenta desafíos importantes. Según el informe, dos tercios de los usuarios de remesas internacionales siguen enfrentando problemas como la incertidumbre en la liquidación de fondos y costes inesperados. Estos obstáculos subrayan la necesidad de mejoras en la infraestructura y en la regulación de los pagos transfronterizos.
A pesar de la preferencia actual por los servicios tradicionales para el envío de dinero, el futuro de estos métodos es incierto. Los expertos sugieren que, de no adaptarse a las nuevas tecnologías y a las demandas del mercado, estos servicios podrían desaparecer para 2035. Este cambio refleja la creciente presión para que las instituciones tradicionales modernicen sus servicios y se adapten a un entorno digital.
Las soluciones Fintech están ganando terreno rápidamente en el ámbito de los pagos transfronterizos. Aunque actualmente solo el 20% de la población utiliza estas soluciones, un 42% comenzó a hacerlo en el último año, y el 15% ya las prefiere sobre los métodos tradicionales. Este rápido cambio sugiere que las Fintech están en camino de convertirse en los actores dominantes en el mercado de remesas y pagos internacionales.
El sector de pagos transfronterizos y remesas está en un punto de inflexión. Con un crecimiento impresionante y el aumento de las soluciones Fintech, el panorama está cambiando rápidamente. Sin embargo, los desafíos persistentes indican que aún queda mucho por hacer para que estos servicios sean más accesibles, rápidos y transparentes para todos.
En un mundo cada vez más interconectado, los pagos transfronterizos están jugando un papel crucial en la economía global. Estos pagos, que permiten transferencias de dinero entre países, están experimentando una transformación significativa debido a la digitalización y la evolución de las Fintech. A continuación, presentamos algunas de las conclusiones más importantes sobre este sector, basadas en el último informe de Minsait Payments.
Los pagos transfronterizos están en una trayectoria de crecimiento acelerado. Se estima que el valor total de estos pagos alcanzará los 250 billones de dólares para 2027. Este aumento refleja la creciente demanda de transacciones internacionales en un mundo globalizado. Sin embargo, a pesar de su expansión, estos pagos siguen enfrentando desafíos significativos, siendo más costosos, lentos y menos transparentes en comparación con las transacciones domésticas.
Latinoamérica es una de las regiones más afectadas por el flujo de remesas, representando el 17% del total mundial. En 2024, se espera que la región gestione un volumen de remesas de 846,000 millones de dólares. Estas remesas son vitales para millones de personas, proporcionando una fuente esencial de ingresos que muchas familias utilizan para cubrir necesidades básicas como alimentación, educación y salud.
Las remesas no solo son un motor económico, sino también un soporte social crítico. En países como Ecuador, Perú, Colombia y República Dominicana, más del 40% de la población depende de las remesas para su subsistencia. En República Dominicana, esta cifra alcanza un asombroso 67%. Este flujo constante de dinero del exterior es esencial para la estabilidad económica y social de muchas comunidades en la región.
A pesar del crecimiento y la importancia de las remesas, el sector enfrenta desafíos importantes. Según el informe, dos tercios de los usuarios de remesas internacionales siguen enfrentando problemas como la incertidumbre en la liquidación de fondos y costes inesperados. Estos obstáculos subrayan la necesidad de mejoras en la infraestructura y en la regulación de los pagos transfronterizos.
A pesar de la preferencia actual por los servicios tradicionales para el envío de dinero, el futuro de estos métodos es incierto. Los expertos sugieren que, de no adaptarse a las nuevas tecnologías y a las demandas del mercado, estos servicios podrían desaparecer para 2035. Este cambio refleja la creciente presión para que las instituciones tradicionales modernicen sus servicios y se adapten a un entorno digital.
Las soluciones Fintech están ganando terreno rápidamente en el ámbito de los pagos transfronterizos. Aunque actualmente solo el 20% de la población utiliza estas soluciones, un 42% comenzó a hacerlo en el último año, y el 15% ya las prefiere sobre los métodos tradicionales. Este rápido cambio sugiere que las Fintech están en camino de convertirse en los actores dominantes en el mercado de remesas y pagos internacionales.
El sector de pagos transfronterizos y remesas está en un punto de inflexión. Con un crecimiento impresionante y el aumento de las soluciones Fintech, el panorama está cambiando rápidamente. Sin embargo, los desafíos persistentes indican que aún queda mucho por hacer para que estos servicios sean más accesibles, rápidos y transparentes para todos.