Fidu, una plataforma argentina de gestión para escuelas, levanta US$5 millones en una ronda semilla liderada por Lightspeed Venture Partners. La startup fundada a inicios de 2022 tiene un modelo de negocio que mezcla fintech y edtech.
El fondo estadounidense Lightspeed Venture Partner apostó por hacer su quinta inversión en Latinoamérica en esta plataforma de gestión integral para instituciones educativas. En México, por ejemplo, invirtió en el unicornio fintech Stori.
En la ronda semilla también participaron los fondos NFX, Imaginable Futures y Broom Ventures.
El CEO de Fidu, Nicolás Giménez, dijo a Bloomberg Línea que el mercado que persiguen (con base en la transaccionalidad de cuotas) vale US$100 mil millones al año en Latinoamérica, donde hay 120.000 escuelas privadas de habla hispana concentradas principalmente en México, Colombia y Argentina.
La startup fundada, además de Giménez por Caterina Carreño (COO) y Ariel Manduca (CTO), automatiza los principales procesos operativos de la institución como, por ejemplo, las cobranzas, la gestión de los costos y la comunicación con la familia por medio de un aplicativo.
En menos de un año operando Fidu ya trabaja con 1.000 instituciones en 10 países de América Latina, aunque de manera remota.
Por ahora, Fidu está abriendo simultáneamente oficinas en México y Colombia, los primeros países de América Latina donde llega de manera presencial.
Esta inversión se da en un contexto en el que las edtech han cobrado relevancia entre los inversionistas de riesgo. De acuerdo con el estudio Panorama del Venture Capital en Latinoamérica de Endeavor y Glisco Partners, en 2021 la inversión para las edtech fue de US$430 millones frente a los US$30 millones de 2020. Y en la media de inversión es de US$5 millones.
Fidu resuelve dos problemáticas principales de las instituciones educativas: la gestión operativa y el área de cobranza.
Los directores de escuelas pasan el 75% de su tiempo en tareas operativas - envío de facturas a las familias y resolver comunicados- y no en tareas vinculadas a la educación, detectó Giménez, que tiene formación en finanzas y en negocios, y que dedicó los primeros años de su carrera como docente en Buenos Aires y en el sector educativo en el diseño de distintos proyectos tecnológicos.
Y por otro lado, identificó que las escuelas también tenían que mejorar su gestión financiera para eficientar sus recursos económicos disponibles. “En general las escuelas tienen niveles de cobranza mensual del 70% sobre la totalidad de la plantilla de estudiantes”, dice Giménez.
“No sólo es el problema del porcentaje de recaudación, después tienen un problema de conciliación de pagos; las escuelas no tienen claro qué familia hizo su pago y qué familia no, lo cual termina haciéndose de manera manual”, detalla Giménez.
Fidu entonces ofrece un software que le automatiza toda la cobranza del lado de la escuela, puede crear sus avisos de pago, enviar esos avisos a las familias y generar la facturación electrónica necesaria.
Además de funcionar como una plataforma de software as a service (software como servicio, SaaS) Fidu también ofrece un servicio financiero para los padres de familia.
Con la implementación de la solución, asegura Giménez, las escuelas pueden ver mejoras de hasta un 15% en la cobranza mensual.
Fidu contó en esta ronda semilla con la participación de inversionistas ángeles como Felipe Villamarín y Andrés Bilbao de Rappi, Matias Woloski de Auth0, Roby Souviron de Despegar y Fabián Gómez de Frubana.
Giménez afirma que además del capital, estos inversionistas ángeles fundadores de unicornios regionales ayudaron a los fundadores de Fidu a construir su deck de inversión, dieron consejos sobre cómo hablar con los inversores.
“Fueron muy cercanos y ese apoyo entre emprendedores latinoamericanos es muy importante para compañías más jóvenes”, dice el emprendedor que ya ha logrado duplicar el tamaño de su equipo, de 15 personas a 33, después de la ronda de inversión.
* Esta nota se corrigió a las 12:08 horas especificando que el cargo de Caterina Carreño es COO de Fidu y no CFO.
Fidu, una plataforma argentina de gestión para escuelas, levanta US$5 millones en una ronda semilla liderada por Lightspeed Venture Partners. La startup fundada a inicios de 2022 tiene un modelo de negocio que mezcla fintech y edtech.
El fondo estadounidense Lightspeed Venture Partner apostó por hacer su quinta inversión en Latinoamérica en esta plataforma de gestión integral para instituciones educativas. En México, por ejemplo, invirtió en el unicornio fintech Stori.
En la ronda semilla también participaron los fondos NFX, Imaginable Futures y Broom Ventures.
El CEO de Fidu, Nicolás Giménez, dijo a Bloomberg Línea que el mercado que persiguen (con base en la transaccionalidad de cuotas) vale US$100 mil millones al año en Latinoamérica, donde hay 120.000 escuelas privadas de habla hispana concentradas principalmente en México, Colombia y Argentina.
La startup fundada, además de Giménez por Caterina Carreño (COO) y Ariel Manduca (CTO), automatiza los principales procesos operativos de la institución como, por ejemplo, las cobranzas, la gestión de los costos y la comunicación con la familia por medio de un aplicativo.
En menos de un año operando Fidu ya trabaja con 1.000 instituciones en 10 países de América Latina, aunque de manera remota.
Por ahora, Fidu está abriendo simultáneamente oficinas en México y Colombia, los primeros países de América Latina donde llega de manera presencial.
Esta inversión se da en un contexto en el que las edtech han cobrado relevancia entre los inversionistas de riesgo. De acuerdo con el estudio Panorama del Venture Capital en Latinoamérica de Endeavor y Glisco Partners, en 2021 la inversión para las edtech fue de US$430 millones frente a los US$30 millones de 2020. Y en la media de inversión es de US$5 millones.
Fidu resuelve dos problemáticas principales de las instituciones educativas: la gestión operativa y el área de cobranza.
Los directores de escuelas pasan el 75% de su tiempo en tareas operativas - envío de facturas a las familias y resolver comunicados- y no en tareas vinculadas a la educación, detectó Giménez, que tiene formación en finanzas y en negocios, y que dedicó los primeros años de su carrera como docente en Buenos Aires y en el sector educativo en el diseño de distintos proyectos tecnológicos.
Y por otro lado, identificó que las escuelas también tenían que mejorar su gestión financiera para eficientar sus recursos económicos disponibles. “En general las escuelas tienen niveles de cobranza mensual del 70% sobre la totalidad de la plantilla de estudiantes”, dice Giménez.
“No sólo es el problema del porcentaje de recaudación, después tienen un problema de conciliación de pagos; las escuelas no tienen claro qué familia hizo su pago y qué familia no, lo cual termina haciéndose de manera manual”, detalla Giménez.
Fidu entonces ofrece un software que le automatiza toda la cobranza del lado de la escuela, puede crear sus avisos de pago, enviar esos avisos a las familias y generar la facturación electrónica necesaria.
Además de funcionar como una plataforma de software as a service (software como servicio, SaaS) Fidu también ofrece un servicio financiero para los padres de familia.
Con la implementación de la solución, asegura Giménez, las escuelas pueden ver mejoras de hasta un 15% en la cobranza mensual.
Fidu contó en esta ronda semilla con la participación de inversionistas ángeles como Felipe Villamarín y Andrés Bilbao de Rappi, Matias Woloski de Auth0, Roby Souviron de Despegar y Fabián Gómez de Frubana.
Giménez afirma que además del capital, estos inversionistas ángeles fundadores de unicornios regionales ayudaron a los fundadores de Fidu a construir su deck de inversión, dieron consejos sobre cómo hablar con los inversores.
“Fueron muy cercanos y ese apoyo entre emprendedores latinoamericanos es muy importante para compañías más jóvenes”, dice el emprendedor que ya ha logrado duplicar el tamaño de su equipo, de 15 personas a 33, después de la ronda de inversión.
* Esta nota se corrigió a las 12:08 horas especificando que el cargo de Caterina Carreño es COO de Fidu y no CFO.