En un entorno donde hay señales de que la normativa comienza a quedarse corta para tecnológicas enfocadas en el sector financiero, Albo, empresa que cuenta con una licencia de Fondos de Pago Electrónico regulada por la Ley Fintech, anunció la adquisición de la firma Delt.ai, especializada en crédito para pequeñas y medianas empresas (pyme) y la cual es parte del selecto grupo del programa de la aceleradora global Y Combinator.
De acuerdo con los detalles de esta transacción, la adquisición fue por un valor cercano a los 20 millones de dólares y con dicha compra Albo robustecerá su oferta en el segmento de crédito para pymes, rubro donde Delt.ai otorgó más de 90 millones de dólares en financiamiento.
Esta operación va a ayudarnos a fortalecer nuestra propuesta de valor y aumentar el tipo y número de productos que ofrecemos a nuestra base de clientes, particularmente para empresas”, declaró en entrevista Ángel Sahagún, fundador de Albo.
Para José de la Luz López, fundador de Delt.ai, incorporarse al ecosistema de Albo hace mucho sentido pues ambas empresas tienen en sus bases factores comunes como quitar fricciones para brindar servicios financieros por medio de herramientas tecnológicas, especialmente para los pequeños y medianos empresarios.
“La intención es demostrar que la tecnología tiene todavía mucho espacio para crecer en México y lo más importante para poder atender a más usuarios y poder ofrecerles los beneficios de las dos plataformas”, comentó De la Luz López, quien se incorporará a Albo como director de Operaciones.
Para el representante de Albo, la adquisición de Delt.ai ayudará a cerrar la pinza dentro de los planes de esta firma en el segmento empresarial, con la oferta de distintas soluciones como una cuenta de débito, financiamiento y soluciones para el pago de salarios a los empleados de las empresas.
“Con esto cerramos la pinza en tres temas: poder ofrecer una cuenta de débito para su negocio en cuestión inmediata, sin comisiones; el acceso a créditos, flexibles, accesibles y podremos ofrecer una plataforma de pagos gratuita para pagar los salarios a los empleados y darles acceso a otros productos financieros”, detalló Sahagún.
El fundador de Albo declaró que esta adquisición es muestra de que las plataformas tecnológicas con un crecimiento acelerado tienen que migrar a otras opciones de mercado más allá de las licencias que consigan.
“Cuando un negocio crece tan bien, lo natural es expandirse a otras verticales y ofrecer cada vez más valor a tus clientes. Es por eso que Albo, que nació como una tarjeta de débito para consumidores, hoy es mucho más, tenemos una plataforma para consumidores y empresas que ofrece crédito, débito y mucho más y seguiremos en ese camino”, acotó.
En mayo del 2022, Albo se convirtió en una institución financiera regulada al conseguir la licencia de Institución de Fondos de Pago Electrónico, lo cual la impulsó para realizar operaciones que superaron los 5,000 millones de dólares y registrar más de 2 millones de usuarios en su plataforma.
Son los primeros pasos apenas de la empresa, tenemos una visión a largo plazo, donde queremos ser la entidad financiera más grande de México y esto es tan solo el inicio”, declaró el fundador de Albo.
Respecto a la posible compra de una financiera popular, Sahagún indicó que si bien ha tenido posibilidades de adquirir este tipo de empresas, hasta el momento no se ha tomado dicha oportunidad.
En un entorno donde hay señales de que la normativa comienza a quedarse corta para tecnológicas enfocadas en el sector financiero, Albo, empresa que cuenta con una licencia de Fondos de Pago Electrónico regulada por la Ley Fintech, anunció la adquisición de la firma Delt.ai, especializada en crédito para pequeñas y medianas empresas (pyme) y la cual es parte del selecto grupo del programa de la aceleradora global Y Combinator.
De acuerdo con los detalles de esta transacción, la adquisición fue por un valor cercano a los 20 millones de dólares y con dicha compra Albo robustecerá su oferta en el segmento de crédito para pymes, rubro donde Delt.ai otorgó más de 90 millones de dólares en financiamiento.
Esta operación va a ayudarnos a fortalecer nuestra propuesta de valor y aumentar el tipo y número de productos que ofrecemos a nuestra base de clientes, particularmente para empresas”, declaró en entrevista Ángel Sahagún, fundador de Albo.
Para José de la Luz López, fundador de Delt.ai, incorporarse al ecosistema de Albo hace mucho sentido pues ambas empresas tienen en sus bases factores comunes como quitar fricciones para brindar servicios financieros por medio de herramientas tecnológicas, especialmente para los pequeños y medianos empresarios.
“La intención es demostrar que la tecnología tiene todavía mucho espacio para crecer en México y lo más importante para poder atender a más usuarios y poder ofrecerles los beneficios de las dos plataformas”, comentó De la Luz López, quien se incorporará a Albo como director de Operaciones.
Para el representante de Albo, la adquisición de Delt.ai ayudará a cerrar la pinza dentro de los planes de esta firma en el segmento empresarial, con la oferta de distintas soluciones como una cuenta de débito, financiamiento y soluciones para el pago de salarios a los empleados de las empresas.
“Con esto cerramos la pinza en tres temas: poder ofrecer una cuenta de débito para su negocio en cuestión inmediata, sin comisiones; el acceso a créditos, flexibles, accesibles y podremos ofrecer una plataforma de pagos gratuita para pagar los salarios a los empleados y darles acceso a otros productos financieros”, detalló Sahagún.
El fundador de Albo declaró que esta adquisición es muestra de que las plataformas tecnológicas con un crecimiento acelerado tienen que migrar a otras opciones de mercado más allá de las licencias que consigan.
“Cuando un negocio crece tan bien, lo natural es expandirse a otras verticales y ofrecer cada vez más valor a tus clientes. Es por eso que Albo, que nació como una tarjeta de débito para consumidores, hoy es mucho más, tenemos una plataforma para consumidores y empresas que ofrece crédito, débito y mucho más y seguiremos en ese camino”, acotó.
En mayo del 2022, Albo se convirtió en una institución financiera regulada al conseguir la licencia de Institución de Fondos de Pago Electrónico, lo cual la impulsó para realizar operaciones que superaron los 5,000 millones de dólares y registrar más de 2 millones de usuarios en su plataforma.
Son los primeros pasos apenas de la empresa, tenemos una visión a largo plazo, donde queremos ser la entidad financiera más grande de México y esto es tan solo el inicio”, declaró el fundador de Albo.
Respecto a la posible compra de una financiera popular, Sahagún indicó que si bien ha tenido posibilidades de adquirir este tipo de empresas, hasta el momento no se ha tomado dicha oportunidad.