Según explicó a Contxto José Tomás Lobo, COO y uno de sus fundadores de Mono, un post suyo en LinkedIn preguntando por recomendaciones de startups en etapa temprana fue el antecedente de esta iniciativa: dio a pie a más de 120 reuniones con emprendedores colombianos. Aunque les sirvió para invertir (terminaron firmando cheques a tres empresas), les sirvió más para darse cuenta que podía crearse una manera más eficiente de conectar a las dos partes de la ecuación: las startups y los inversionistas. Con ambas estaban bien contactados, pues conocen bien a las startups que son su clientes y ellos como empresa están vinculados a fondos e inversionistas.
Las startups deben enviar su deck de inversión y el equipo de Mono, tras categorizarlos en criterios como tipo de industria, etapa de desarrollo o monto que buscan levantar, le envían la información filtrada a los fondos inversionistas. “Nosotros hablamos previamente con los fondos para conocer bien su tesis de inversión. Lo que hacemos es entregarles recomendaciones según lo que ellos nos comunicaron que buscan en startups. Eso es bastante amplio, por lo que esperamos que salgan muchas reuniones”, cuenta Lobo.
La condición para participar es que deben ser clientes de Mono, aunque la empresa destaca en su comunicado que abrirse una cuenta no toma más de 15 minutos, cuenta que no tiene cuota de manejo. Además subrayan que participar en Mono VC no tiene ningún costo ni piden ellos ningún porcentaje de participación.
Consultado sobre si Mono VC nació también como una forma de atraer nuevos clientes, Lobo dice que la motivación principal es diferente. Nació mientras estaban en Y Combinator en San Francisco: “Nos pusimos la meta de hacer crecer mucho el ecosistema de startups en Colombia”. Y añade: “Es para clientes ahora, para que podamos filrar un poco más. Pero la verdad no nos cerramos a que sea siempre así”.
Mono VC destaca que entre su lista de inversionistas hay fondos de inversión de la talla de ALLVP, QED y Magma Partners, además de varios founders de startups que han pasado por Y Combinator, inversionistas de Rappi e inversionistas ángeles en general.
Según explicó a Contxto José Tomás Lobo, COO y uno de sus fundadores de Mono, un post suyo en LinkedIn preguntando por recomendaciones de startups en etapa temprana fue el antecedente de esta iniciativa: dio a pie a más de 120 reuniones con emprendedores colombianos. Aunque les sirvió para invertir (terminaron firmando cheques a tres empresas), les sirvió más para darse cuenta que podía crearse una manera más eficiente de conectar a las dos partes de la ecuación: las startups y los inversionistas. Con ambas estaban bien contactados, pues conocen bien a las startups que son su clientes y ellos como empresa están vinculados a fondos e inversionistas.
Las startups deben enviar su deck de inversión y el equipo de Mono, tras categorizarlos en criterios como tipo de industria, etapa de desarrollo o monto que buscan levantar, le envían la información filtrada a los fondos inversionistas. “Nosotros hablamos previamente con los fondos para conocer bien su tesis de inversión. Lo que hacemos es entregarles recomendaciones según lo que ellos nos comunicaron que buscan en startups. Eso es bastante amplio, por lo que esperamos que salgan muchas reuniones”, cuenta Lobo.
La condición para participar es que deben ser clientes de Mono, aunque la empresa destaca en su comunicado que abrirse una cuenta no toma más de 15 minutos, cuenta que no tiene cuota de manejo. Además subrayan que participar en Mono VC no tiene ningún costo ni piden ellos ningún porcentaje de participación.
Consultado sobre si Mono VC nació también como una forma de atraer nuevos clientes, Lobo dice que la motivación principal es diferente. Nació mientras estaban en Y Combinator en San Francisco: “Nos pusimos la meta de hacer crecer mucho el ecosistema de startups en Colombia”. Y añade: “Es para clientes ahora, para que podamos filrar un poco más. Pero la verdad no nos cerramos a que sea siempre así”.
Mono VC destaca que entre su lista de inversionistas hay fondos de inversión de la talla de ALLVP, QED y Magma Partners, además de varios founders de startups que han pasado por Y Combinator, inversionistas de Rappi e inversionistas ángeles en general.