La evolución y crecimiento en el sector de los pagos es una realidad que observamos en los últimos años. Las necesidades de usuarios cada vez más digitales, las regulaciones en constante evolución y los avances tecnológicos son algunos de los factores con un peso determinante en la trayectoria del ecosistema.
El Informe, referente entre los profesionales del sector, aporta una mirada hacia el futuro de los pagos tanto en Europa como en Latinoamérica, apoyándose en los datos consolidados a lo largo de los últimos doce años.
Estudiamos el panorama actual con una visión 360º sobre las tendencias del sector:
+70 directivos del sector encuestados
365 días al año en observación de noticias relevantes
12 países analizados en Iberoamérica
+7.200 encuestas a la población bancaria
En esta 12º edición, realizamos un estudio en base a seis tendencias:
- Los pagos digitales: Las nuevas propuestas, los nuevos agentes y la acción de las administraciones públicas en un contexto tan singular como la pandemia han facilitado un avance espectacular de la digitalización de los pagos. Sin embargo, a nivel global solo la mitad de la población está equipada para adoptarlos, por lo que persiste el reto de universalizar el acceso y el uso. Un reto que ha de ser transformado en oportunidad por la industria de los medios de pago.
- La batalla por el control de la experiencia de pago: Estar en el top-of-mind del consumidor en un momento de creciente diversificación de proveedores y de soluciones de pago digital es consustancial al contexto competitivo actual. Convertirse en la puerta de entrada -o de salida- y ser visible y reconocible en el momento del pago, resulta hoy prioritario para vencer la batalla ya iniciada por convertirse en la solución preferida del consumidor.
- Buy Now, Pay Later: BNPL abre paso a la financiación contextual, además, es un buen ejemplo de integración de atributos innovadores a un servicio tradicional -pago a plazos- que ha conseguido resolver muchos de los “pains” de los procesos de compra. Su espectacular crecimiento así lo confirma. Extender la práctica de integrar soluciones para facilitar la adopción, fomentar el uso, eliminar fricciones y ofrecer servicios ad-hoc personalizados en tiempo real es una tendencia imparable de la industria, cuya puesta en marcha exige agilidad.
- Monedas Digitales: Los criptoactivos son, para el 72% de las voces de la industria y para el 80% de las personas que consideraría adquirirlos, un activo de inversión y no un medio de pago, mucho menos cotidiano. Las monedas digitales de bancos centrales sí serán un medio de pago cotidiano, y antes de 2030 en muchas geografías, cuyo despliegue se prevé con la participación esencial de las entidades bancarias.
- Nuevos flujos de pago: En la próxima década, el enfoque de la innovación en pagos se reorientará, y pasará de estar centrado en el segmento de particulares a atender las muchas necesidades que enfrenta el segmento de empresas, diferentes en función de su dimensión, sector de actividad, relaciones con terceros y despliegue geográfico. Los pagos masivos, recurrentes, urgentes, transfronterizos, inmediatos… son ejemplos de flujos inmensos y diversos que protagonizarán las innovaciones del futuro cercano.
- Pagos sostenibles: El impacto ambiental asociado a los diferentes medios de pago será pronto un factor que trascenderá de la mera concienciación a la decisión y a la acción. La industria se encuentra en una fase de reflexión y exploración de iniciativas transformadoras, consciente del riesgo de greenwashing o ecoblanqueo que exige coherencia y cautela en el diseño y lanzamiento de productos y soluciones vinculados a propósitos o factores ESG.