A inicios de este año sacamos nuestra bola de cristal para predecir qué podría suceder a lo largo del 2024. Aunque algunas noticias revolucionaron positivamente al ecosistema, otras simplemente no pasaron ni a saludar. En consecuencia, te traemos el top de tendencias que dieron de qué hablar durante el 2024.
Mientras Pix era una de las grandes innovaciones en el ecosistema de Pagos Inmediatos de Brasil. En agosto de este año, el Banco de la República de Colombia anunció una noticia que muy pocos esperaban: la llegada de Bre-B al país. El sistema tiene como fin conectar diferentes plataformas, como Transfiya, para facilitar que los usuarios realicen transferencias entre diversas entidades financieras en cuestión de segundos. Se espera que el servicio empiece a funcionar en el primer semestre de 2025 por medio de las aplicaciones de las entidades financieras participantes.
Perú ya se encuentra dando los primeros pasos para la regulación en el ecosistema Fintech, sentando bases para un marco en las finanzas abiertas. La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS), que supervisa el sector financiero peruano, ha emitido varias resoluciones para regular las actividades Fintech, promoviendo la innovación y la competencia en el mercado financiero este 2024.
Aunque 2023 no fue el mejor año para las inversiones en el ecosistema, el 2024 llegó a revolucionar toda la región; siendo Brasil el país con más inversiones, logrando montos de más de US$400M. Te dejamos las inversiones más top de ecosistema este 2024:
Para México el 2024 fue un año lleno de licencias otorgadas a neobancos, que apuestan por la inclusión financiera en el país. Un claro ejemplo de ello sucedió en octubre, cuando el banco digital del grupo Santander, Openbank, alcanzó su licencia por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores para iniciar sus operaciones. Otros casos son la filial mexicana de Nubank y Revolut. Sin embargo, gran parte de las licencias que se han logrado en el país solo se han llevado a cabo a neobancos que hacen parte de una banca tradicional, pues en septiembre la Paytech Mercado Pago solicitó sus licencia bancaria, la cual aún no ha sucedido.
El inicio de año para las Fintechs colombianas estuvo lleno de buenas noticias enfocadas en el Open Banking. En febrero, la Superfinanciera definió el marco regulatorio de las finanzas abiertas en el país, siendo la segunda de las cuatro fases para su implementación. Dentro de la fase dos se construyó las instrucciones que permiten compartir datos con base en los protocolos tecnológicos y estándares de seguridad, de tal forma de que los ciudadanos puedan mover su información personal de una entidad vigilada a otra.
Ahora bien, mientras algunas Fintech celebraban regulaciones y crecimientos, en otras partes de la región las tendencias que esperaban que sucedieran este 2024 se quedaron en el tintero.
Aunque los argentinos esperaban más regulaciones Fintech a su favor, pocos días después de que el 2023 terminara, la Cámara Argentina Fintech manifestó su preocupación tras la eliminación por parte del Gobierno a las medidas de alivio fiscal en los cobros electrónicos, las cuales estaban incluidas en la Ley Ómnibus. La noticia afectó a las pymes, debido a que la ley eliminaba las retenciones impositivas a los cobros digitales y permitía una mayor digitalización en el país.
Este 2024 en Perú se esperaban más avances para la ciberseguridad. A pesar de que el país cuenta con sentencias que aportan mejoras en el campo de la ciberseguridad, Perú aún no saca un documento que trate dicho tema y que este mismo incluya a las Fintech dentro del panorama.
Otra tendencia que dio menos de lo que se esperaba este 2024 fue el crowdfunding. Aunque en la región el lanzamiento de Crowder en Uruguay y su autorización para que iniciara sus funciones, así como la autorización por parte del CNBV a Afluenta impactaron este año. El crecimiento de esta arista del ecosistema no ocurrió en la misma medida que muchos esperaban.
El 2024 fue un año en el que las Fintech tuvieron buenas y malas noticias. A su vez, algunas predicciones de nuestra bola de cristal sucedieron y otras se quedaron atrapadas en la urgencia de seguir innovando en el ecosistema. Esperamos que el 2025 sea un año en el que cada una de las tendencias que decimos a inicios de cada año, sucedan para mejorar la inclusión financiera en la región.
A inicios de este año sacamos nuestra bola de cristal para predecir qué podría suceder a lo largo del 2024. Aunque algunas noticias revolucionaron positivamente al ecosistema, otras simplemente no pasaron ni a saludar. En consecuencia, te traemos el top de tendencias que dieron de qué hablar durante el 2024.
Mientras Pix era una de las grandes innovaciones en el ecosistema de Pagos Inmediatos de Brasil. En agosto de este año, el Banco de la República de Colombia anunció una noticia que muy pocos esperaban: la llegada de Bre-B al país. El sistema tiene como fin conectar diferentes plataformas, como Transfiya, para facilitar que los usuarios realicen transferencias entre diversas entidades financieras en cuestión de segundos. Se espera que el servicio empiece a funcionar en el primer semestre de 2025 por medio de las aplicaciones de las entidades financieras participantes.
Perú ya se encuentra dando los primeros pasos para la regulación en el ecosistema Fintech, sentando bases para un marco en las finanzas abiertas. La Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS), que supervisa el sector financiero peruano, ha emitido varias resoluciones para regular las actividades Fintech, promoviendo la innovación y la competencia en el mercado financiero este 2024.
Aunque 2023 no fue el mejor año para las inversiones en el ecosistema, el 2024 llegó a revolucionar toda la región; siendo Brasil el país con más inversiones, logrando montos de más de US$400M. Te dejamos las inversiones más top de ecosistema este 2024:
Para México el 2024 fue un año lleno de licencias otorgadas a neobancos, que apuestan por la inclusión financiera en el país. Un claro ejemplo de ello sucedió en octubre, cuando el banco digital del grupo Santander, Openbank, alcanzó su licencia por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores para iniciar sus operaciones. Otros casos son la filial mexicana de Nubank y Revolut. Sin embargo, gran parte de las licencias que se han logrado en el país solo se han llevado a cabo a neobancos que hacen parte de una banca tradicional, pues en septiembre la Paytech Mercado Pago solicitó sus licencia bancaria, la cual aún no ha sucedido.
El inicio de año para las Fintechs colombianas estuvo lleno de buenas noticias enfocadas en el Open Banking. En febrero, la Superfinanciera definió el marco regulatorio de las finanzas abiertas en el país, siendo la segunda de las cuatro fases para su implementación. Dentro de la fase dos se construyó las instrucciones que permiten compartir datos con base en los protocolos tecnológicos y estándares de seguridad, de tal forma de que los ciudadanos puedan mover su información personal de una entidad vigilada a otra.
Ahora bien, mientras algunas Fintech celebraban regulaciones y crecimientos, en otras partes de la región las tendencias que esperaban que sucedieran este 2024 se quedaron en el tintero.
Aunque los argentinos esperaban más regulaciones Fintech a su favor, pocos días después de que el 2023 terminara, la Cámara Argentina Fintech manifestó su preocupación tras la eliminación por parte del Gobierno a las medidas de alivio fiscal en los cobros electrónicos, las cuales estaban incluidas en la Ley Ómnibus. La noticia afectó a las pymes, debido a que la ley eliminaba las retenciones impositivas a los cobros digitales y permitía una mayor digitalización en el país.
Este 2024 en Perú se esperaban más avances para la ciberseguridad. A pesar de que el país cuenta con sentencias que aportan mejoras en el campo de la ciberseguridad, Perú aún no saca un documento que trate dicho tema y que este mismo incluya a las Fintech dentro del panorama.
Otra tendencia que dio menos de lo que se esperaba este 2024 fue el crowdfunding. Aunque en la región el lanzamiento de Crowder en Uruguay y su autorización para que iniciara sus funciones, así como la autorización por parte del CNBV a Afluenta impactaron este año. El crecimiento de esta arista del ecosistema no ocurrió en la misma medida que muchos esperaban.
El 2024 fue un año en el que las Fintech tuvieron buenas y malas noticias. A su vez, algunas predicciones de nuestra bola de cristal sucedieron y otras se quedaron atrapadas en la urgencia de seguir innovando en el ecosistema. Esperamos que el 2025 sea un año en el que cada una de las tendencias que decimos a inicios de cada año, sucedan para mejorar la inclusión financiera en la región.