Son las empresas de tecnología e infraestructura financiera quienes están liderando el camino hacia una adopción más amplia de soluciones multidivisa. Tal es el caso de Pomelo, la compañía de tecnología líder que ha desarrollado una infraestructura de procesamiento que permite que las empresas puedan brindarle a sus usuarios la posibilidad de gestionar sus saldos en múltiples monedas mediante una sola tarjeta, sin costos por conversiones de tipo de cambio.
En este marco y particularmente en Colombia, donde se han disparado los viajes al exterior, las tarjetas multidivisa se convierten en una herramienta esencial para hacer pagos, inversiones e incluso ahorros. “Con una cifra alrededor de 6 millones de colombianos viajando al exterior cada año, la posibilidad de usar una misma tarjeta para hacer todo tipo de pagos en diversas monedas ha aumentado y son los emisores del sector Fintech, retailers y nuevas marcas los que acompañan a los jugadores tradicionales en el ofrecimiento de este servicio”, explica Diego Quesada, Country Manager de Pomelo para los países Andinos.
Es un producto gracias al cual son los usuarios quienes pueden elegir en qué moneda pagar. Además, estas tarjetas eliminan o reducen considerablemente los costos asociados a la conversión de divisas, ahorrando tiempo y dinero, lo que brinda una mayor transparencia financiera. Este cambio de paradigma en el sistema de pagos impacta a los usuarios, pero también a las empresas.
“En Pomelo apostamos por la innovación tecnológica y con nuestra infraestructura acompañamos la emisión y procesamiento de aquellas marcas que quieren presentar propuestas de valor disruptivas como tarjetas multidivisa. A través de este producto nuestros clientes le permiten a sus usuarios gestionar sus necesidades de pago sin importar el contexto y con una mayor flexibilidad y conveniencia”, comenta Quesada.
Estas tarjetas no solo benefician a las empresas, sino que también representan una herramienta crucial para la inclusión financiera en la región. Al simplificar las transacciones y reducir los costos asociados, estas soluciones democratizan el acceso a servicios financieros avanzados.
Sin dudas, el futuro de las transacciones internacionales en América Latina está evolucionando rápidamente gracias a soluciones innovadoras como las tarjetas multidivisa. Mientras las empresas continúan adaptándose a un entorno globalizado, este tipo de productos se vuelve esencial para habilitar un comercio más fluido, competitivo y accesible en toda la región.
Son las empresas de tecnología e infraestructura financiera quienes están liderando el camino hacia una adopción más amplia de soluciones multidivisa. Tal es el caso de Pomelo, la compañía de tecnología líder que ha desarrollado una infraestructura de procesamiento que permite que las empresas puedan brindarle a sus usuarios la posibilidad de gestionar sus saldos en múltiples monedas mediante una sola tarjeta, sin costos por conversiones de tipo de cambio.
En este marco y particularmente en Colombia, donde se han disparado los viajes al exterior, las tarjetas multidivisa se convierten en una herramienta esencial para hacer pagos, inversiones e incluso ahorros. “Con una cifra alrededor de 6 millones de colombianos viajando al exterior cada año, la posibilidad de usar una misma tarjeta para hacer todo tipo de pagos en diversas monedas ha aumentado y son los emisores del sector Fintech, retailers y nuevas marcas los que acompañan a los jugadores tradicionales en el ofrecimiento de este servicio”, explica Diego Quesada, Country Manager de Pomelo para los países Andinos.
Es un producto gracias al cual son los usuarios quienes pueden elegir en qué moneda pagar. Además, estas tarjetas eliminan o reducen considerablemente los costos asociados a la conversión de divisas, ahorrando tiempo y dinero, lo que brinda una mayor transparencia financiera. Este cambio de paradigma en el sistema de pagos impacta a los usuarios, pero también a las empresas.
“En Pomelo apostamos por la innovación tecnológica y con nuestra infraestructura acompañamos la emisión y procesamiento de aquellas marcas que quieren presentar propuestas de valor disruptivas como tarjetas multidivisa. A través de este producto nuestros clientes le permiten a sus usuarios gestionar sus necesidades de pago sin importar el contexto y con una mayor flexibilidad y conveniencia”, comenta Quesada.
Estas tarjetas no solo benefician a las empresas, sino que también representan una herramienta crucial para la inclusión financiera en la región. Al simplificar las transacciones y reducir los costos asociados, estas soluciones democratizan el acceso a servicios financieros avanzados.
Sin dudas, el futuro de las transacciones internacionales en América Latina está evolucionando rápidamente gracias a soluciones innovadoras como las tarjetas multidivisa. Mientras las empresas continúan adaptándose a un entorno globalizado, este tipo de productos se vuelve esencial para habilitar un comercio más fluido, competitivo y accesible en toda la región.